LOS ÁNGELES — Desde que los Dodgers estuvieron abajo 6-1 en el Juego 3 de su Serie Divisional contra los Padres el pasado martes, han dominado a sus rivales con un marcador global de 23-0. Durante ese período, han lanzado 33.0 entradas consecutivas en blanco, estableciendo un nuevo récord de la Liga Nacional y empatando la marca histórica de MLB que ostentaban los Orioles de 1966.
El Juego 1 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional contra los Mets continuó con ese dominio, con una victoria contundente de 9-0 en el primer encuentro de la serie al mejor de siete juegos.
“Ha sido una gran racha para nuestros muchachos”, comentó el receptor de los Dodgers, Will Smith. “Yo estoy detrás pidiendo los lanzamientos, pero son ellos quienes ejecutan lo que decidimos”.
En este primer juego frente a Nueva York, el protagonista fue el abridor Jack Flaherty. El derecho lanzó 7.0 entradas en blanco, permitiendo solo dos hits y ponchando a seis ante una alineación de los Mets que venía en racha tras su dramática clasificación en Atlanta, eliminando a los Cerveceros en la Serie del Comodín y superando a los Filis en la ronda divisional.
“Fue una verdadera clínica de pitcheo”, dijo el mánager de los Dodgers, Dave Roberts. “Una vez tomamos la ventaja, Jack hizo un gran trabajo atacando a los bateadores. Que nos brindara siete entradas fue enorme”.
Tras las siete sólidas entradas de Flaherty, los Dodgers usaron a Daniel Hudson para una entrada y a Ben Casparius para cerrar el juego. Esto les permitirá realizar un “juego del bullpen” en el Juego 2, reservando a los otros abridores, Walker Buehler y Yoshinobu Yamamoto, para los Juegos 3 y 4, respectivamente.
El abridor de los Mets para el segundo juego será el zurdo Sean Manaea.
“Fue muy divertido”, expresó Flaherty, quien es oriundo del sur de California y creció yendo al Dodger Stadium para ver a su equipo favorito de la infancia. “Lo más importante fue salir y marcar el ritmo. Y una vez tomamos la ventaja en la primera entrada, mantenerlos en cero y regresar al dugout fue crucial”.
Aunque muchos los dieron por perdidos tras su derrota en el Juego 3 en San Diego hace seis días, los Dodgers se han recuperado jugando el tipo de béisbol que les dio el mejor récord de la temporada regular, con 98 victorias.
“Creo que ha sido un esfuerzo colectivo”, destacó Roberts. “Los jugadores que han estado involucrados en todas esas entradas en blanco han sido fantásticos”.
El jardinero dominicano de los Dodgers, Teóscar Hernández, añadió: “Nuestro pitcheo ha sido excelente. Logramos anotar algunas carreras para ganar el juego. Ahora solo nos queda salir y dar lo mejor de nosotros y mantener ese impulso para el juego del lunes”.