Un total 110 jugadores insertados en las nóminas de los 6 equipos que componen la Liga Dominicana de Béisbol Profesional (LIDOM) califican para acceder a la agencia libre en caso de no ser firmados nuevamente por sus equipos antes del 15 marzo próximo.
Así lo consigna el nuevo pacto laboral entre la LIDOM y la Federación Nacional de Peloteros Profesionales (FINAPREPO), que marca el inicio de un proceso más democrático en el aspecto laboral de las franquicias y sus jugadores.
Once peloteros de las Estrellas, 14 de los Leones , 18 aguiluchos, 19 de los Toros , 21 liceístas y 27 de los Gigantes, abrirán este mercado, hasta hoy inexplorado por la pelota criolla.
El proceso es interesante, por cuanto podremos quizás tener acceso a parte del sistema contractual de jugadores nativos, cuya transparencia ha sido siempre una especia de tabú para la prensa y los fanáticos dominicanos.
Por ejemplo mediante la plataforma Baseball Reference he encontrado el dato extraído de MLB, de que Juan Soto ganó el año pasado con Washington y San Diego 17 millones ,100 dólares.
Si Soto hubiese jugado con el Licey como amenazó la temporada pasada, nunca se habría sabido cuanto ganaba. Ojala que a partir de ahora podamos conocer el dato.
Lo interesante de este proceso es que abrirá una caja de pandora, todo por etapa, mediante la cual la pelota profesional criolla tendrá la oportunidad de convertirse en una industria, cuyas realidades sean del conocimiento público y se entiendan sus pasos y necesidades.
La agencia libre de entrada nos mostrará la real situación de jugadores en los equipos, las responsabilidades que acordaran entre un sector y otro.
Hasta este año un jugador entra y sale del equipos cuando quiere, solo tiene que tener una excusa o inventársela.
Que lo pararon de Estados Unidos o que lo firmaron en Asia, causando a veces desequilibrio al proyecto de ganar en LIDOM que tienen los conjuntos.
Otras veces jugadores con talentos, son mantenidos en lista de reserva, o en el banco sin recibir las oportunidades que le permitan crecer en su carrera provocándole los equipos un estancamiento.
La libre agencia le dará a unos y otros la oportunidad de marcar su futuro por medio propio.
La tarea apenas empieza, la luna de miel en estos aspectos dura poco, cuando las estrategias de unos, chocan con los intereses de la otra parte. Hay ocasiones en las que chocan y sacan chispa y hay otras en las que se abrazan.
Los dominicanos somos expertos en arreglar la carga en el camino o “buscarle un bajadero a las cosas “, por lo que me atrevo a pronosticar que tendremos una agencia libre “sui generis”.
Las reacciones a mi entender son de “pronostico reservado”
Esperemos.