DETROIT — Miguel Cabrera recibió una base por bolas intencional en el octavo inning a falta de un imparable para llegar a los 3.000 en su carrera, lo que desató un enorme abucheo en Comerica Park, y los Tigres de Detroit derrotaron el jueves 3-0 a los Yanquis de Nueva York.
Cabrera se fue de 3-0 con dos ponches, obligándolo a él y a los aficionados de Detroit a esperar al menos un día más para conectar su hit 3.000, una cifra que sólo han alcanzado 32 peloteros en la historia de Grandes Ligas.
Al frente 1-0, los Tigres llenaron las bases sin outs en el octavo inning ante Miguel Castro. El relevista Lucas Luetge retiró a Jeimer Candelario con un rodado al montículo que se convirtió en una doble matanza.
Eso llevó a Cabrera al plato con dos fuera y corredores en segunda y tercera. El toletero de 39 años ni siquiera llegó a la caja de bateo cuando el manager de los Yanquis Aaron Boone anunció desde la caseta el pasaporte intencional para Cabrera, su excompañero con los Marlins de Miami.
“Fue una decisión de béisbol”, aseguró Boone.
“Obviamente, el momento, fue un poco más controversial de lo habitual”.
La base por bolas intencional número 236 en la carrera de Cabrera, aunque justificada, desató tal vez el peor abucheo en la historia de Comerica Park, el cual se inauguró en 2000.
Boone dijo que no le sorprendió la reacción de los aficionados.
“Desde luego, sin dudas lo entiendo”, declaró. “No necesariamente estás conforme en esa posición”.
Los 21.529 asistentes no tardaron en cambiar los abucheos en aplausos después de que Austin Meadows conectó un doblete de dos carreras para poner a Detroit al frente por tres.
Al concluir la entrada, Cabrera extendió los brazos para decirles a los aficionados que estaba tranquilo con la situación. Luego levantó tres dedos y apuntó a la pizarra para indicar el número de carreras de su equipo.
“Es lo hermoso de este deporte”, dijo a las afueras del camerino al finalizar el partido.
Michael Pineda (1-0) admitió apenas tres hits en cinco innings en su debut con los Tigres en contra de uno de sus exequipos. Jacob Barnes, Wily Peralta, Alex Lange y Gregory Soto, quien sumó su tercer rescate, trabajaron cuatro entradas en blanco en labor de relevo.
Los Yanquis sufrieron su tercera blanqueada de la campaña y sus 39 anotaciones luego de 13 encuentros son su cifra más baja desde 1972.
Jordan Montgomery (0-1) se convirtió en el primer abridor de los Yanquis en completar seis entradas esta temporada. Permitió apenas una carrera y tres imparables con cinco ponches, pero no recibió ayuda de sus compañeros a la ofensiva.
Por los Tigres, los venezolanos Cabrera de 3-0; Vícor Reyes de 3-1 con una anotada. El puertorriqueño Wili Castro de 3-1. El dominicano Jeimer Candelario de 4-0.
Por los Yanquis, los venezolanos Gleyber Torres de 1-1; Marwin González de 2-0.