En realidad existìan pocas expectativas con relación al regreso del púgil norteamericano Evander Holyfield.
Y es que a los 58 años (a un mes de cumplir 59) es poco o nada positivo lo que se puede esperar de un boxeador.
Sin embargo, cuanto menos se esperaba que, con lo poco que podía quedarle, le fuera suficiente para vencer a un rival que provenìa de las artes marciales mixtas y que apenas tuvo un combate en este deporte –noqueò a un rival en el 2006-, como era el caso del brasileño Vitor Belford.
Ambos se enfrentaron el pasado sábado, en el Simikole Aard Rock de La Florida, y la verdad es que resultò penoso ver como Belford vapuleò a Holyfield previo a noquearlo rápidamente apenas al minuto y 48 segundos del mismo primer asalto de un duelo pactado a ocho.
Belford no dio tregua a Holyfield y desde el principio atacó al estadounidense tambaleándose primero con una izquierda (el sudamericano es de guardia zurda) y luego lo envió a la loca con un uppercut de izquierda. Holyfield se levantó pero Belford siguió atacando con una andanada de izquierda y derechas, lo que obligó al referì a detener la contienda y decretar el nocaut técnico a favor de Belford.
Holyfield, quien se mostró en desacuerdo con la detención de las acciones, prácticamente no pudo hacer nada, no mostró oposición y sólo atinó a cubrirse de los ataques de su más joven adversario, de 44 años de edad.
Fue una muy pobre demostración de Holyfield, lo que pone en evidencia de que lo mejor que hace es retirarse definitivamente del deporte en que se convirtió en toda una leyenda, sin discusión, uno de los más grandes boxeadores de la historia y resultó muy triste ver su final.
Que conste, Belford no hubiese podido ni llevarle el bulto a Holyfield cuando éste estaba en su momento, en la plenitud de sus facultades, pues su calidad de superestrella del tinglado, fue incuestionable.
Empero, la tozudez suele ser mala consejera y Holyfield, quizás por necesidad, se vio motivado a regresar en busca de ganar algún dinero, anteponiendo lo econòmico al riesgo de su salud y la mancha de toda la gloria alcanzada en màs de 20 años en el pugilismo de paga en una carrera brillante, en la que conquistò siete títulos mundiales en dos pesos diferentes (tres en los cruceros y cuatro en los pesados).
De hecho, este doloroso resultado automáticamente arruina un proyectado tercer combate que tenía en agenda Holyfield ante Mike Tyson, el cual le hubiese dejado ganancias millonarias, y que, inclusive, es oportuno señalar, fue la razón principal de su regreso.
Ahora sólo le resta acogerse obligatoriamente al retiro tras evidenciarse de que ya nada tiene que buscar en esta disciplina.
Y es que los años no pasan en vano y el padre tiempo todo lo destruye, es implacable, sobre todo cuando se trata de un deporte tan exigente y rudo como el boxeo, en el que cada golpe, con el paso del almanaque, va pasando factura en la anatomía del boxeador y erosionando irremisiblemente sus facultades, por brillantes y excepcionales que èstas sean.
Holyfield, cuya récord queda ahora en 44-11-2, una pelea nula, con 29 nocauts, no es una excepción. Ya vivieron las mismas experiencias o muy parecidas, luminarias de la talla de:Sugar Ray Robinson, considerado el màs grande de todos los tiempos, Joe Louis, Muhammad Ali, Sugar Ray Leonard, Roberto Duràn y otros.
De ahì el que, lo que acaba de ocurrir a Holyfield, bien podría servir de ejemplo a figuras como el propio Tyson y Oscar de la Hoya, entre otros, quienes han decidido volver a retomar el camino, esperanzados erróneamente en seguir acumulando lauros –o ganar algún dinero- cuando ya hace tiempo que vieron pasar sus mejores días y no son ni la sombra de lo que algún dìa fueron, sino màs bien especie de “fòsiles” con guantes, dignos de ser compadecidos y de que se les proteja.Las autoridades boxísticas deben frenar estos desacertados regresos por el bien no sòlo de los boxeadores, sino del propio boxeo, en sentido general. PARA QUE LO APRENDAS O LO RECUERDES:A propósito, de Holyfield, èste no es el boxeador màs viejo en subir a una pelea oficial.Ya en el pasado -2017-, el inglès Steve Ward lo hizo cuando contaba con 60 años de edad, cuya hazaña figura en rècord Guinness. No obstante, el 14 de diciembre de 2019, el norteamericano Albert Hughes ganó por nocaut en el segundo asalto a su rival Tramane Town, de 43, cuando contaba con 70 años de edad, aunque su hazaña aùn no ha sido reconocida por el libro de rècord Guinness y la que està registrada es la de Ward.!Suena la campana! ¡Climmp!
Pie
La leyenda Evander Holyfield, izquierda, es noqueado por Belford.Foto fuente externa.