SANTIAGO.- Los jugadores Diego Goris y Darío Álvarez fueron honrados como Embajadores Deportivo de Buena Voluntad, por parte de la Universidad Isa (UNISA), la cual ayudaron a conquistar el torneo de béisbol olímpico de Santiago.
Goris y Álvarez forman parte de la delegación dominicana que estará en Tokio, Japón, defendiendo el lienzo tricolor en la disciplina de béisbol, a la que ayudaron con formidables jornadas a clasificarse al magno evento del deporte.
Con Goris defendiendo la tercera base y como Capitán de Unisa, se alzaron con la corona de campeones y Álvarez lanzador zurdo como su cerrador estrella.
El acto celebrado en la alta casa de estudios, comenzó con las palabras de bienvenida a cargo del profesor y cronista deportivo Apolinar Peralta, quien es el Director de Deportes.
Luego se dirigió a los presentes el ingeniero Ángel Rivas, Vicerrector académico de Unisa, quien agradeció el esfuerzo de Goris y Álvarez para conquistar la corona.
“Así espera que ustedes también regresen con una medalla de los Juegos Olímpicos de Tokio y que viajen como dignos embajadores deportivos que son”, puntualizó Rivas.
Previo al reconocimiento de Diego Goris, el cronista deportivo Bienvenido Tavárez leyó la semblanza del jugador, indicando que es un jugador ganador.
Destacó que Goris fue campeón con las Águilas Cibaeñas, los Granjeros de Moca, la Universidad Isa y clasificaron en el Preolímpico para estar en la cita de Tokio 2020.
Goris agradeció el reconocimiento indicando que el apoyo de su familia ha sido clave en su carrera de beisbolista.
El antesalista dominicano estuvo acompañado de su esposa, la socióloga Lismayra López, así como de su madre, hermanos y su hija.
Diego Goris recibió una medalla y un diploma como Embajador Deportivo de Buena Voluntad, que entregaron el ingeniero Ángel Rivas, Sergio Jato, decano de estudiantes y Apolinar Peralta.
También se entregó la misma distinción a Darío Álvarez, quien no pudo estar presente, ya que cumple compromiso en México.
Rafael “Fellito” Ortiz leyó la semblanza sobre la carrera de Darío Álvarez, quien fue representado por Junior Mariñez, manager de Unisa en el béisbol olímpico.
Al cierre los invitados disfrutaron de un almuerzo que ofreció la Universidad Unisa.
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Diego Goris recibiendo la condecoración como Embajador Deportivo de Buena Voluntad.