La muerte de Don Osvaldo Virgil enlutece el béisbol de República Dominicana. Apenas el pasado 23 del presente mes se cumplieron 68 años del gran acontecimiento que representó su debut como el primer dominicano en jugar en Grandes Ligas(23 septiembre de 1956)
Lamentablemente, como premonición del destino, ese aniversario se convierte en una especie de preámbulo a su doloroso fallecimiento, en razón de que informes daban cuenta de que Virgil desde hacía un tiempo estaba convaleciente de algunos quebrantos de salud que venían aquejándole, en buena medida producto de su avanzada edad, -aún no se han ofrecido detalles en torno a la real causa de su deceso-.
Su partida, que coincidencialmente se produce el mismo mes en que estableció el precedente en que abrió las puertas para que cientos de dominicanos llegaran a las Mayores, no borrará la gran importancia de su legado que,por el contrario, con el paso de los años cobrará un mayor valor para el béisbol doméstico.Paz a sus restos y nuestras más sentidas condolencias a sus familiares.
Sólida esperanza…
Dentro de la nueva camada del boxeo dominicano, existe uno que brilla con luz propia en la escena internacional de este deporte.
Se trata de Rohan Polanco, un exmiembro de la selección nacional que desde sus inicios mostró que tenía condiciones excepcionales para triunfar en esta ruda disciplina y quien actualmente combate en la división de los welter junior -140 libras-.
De hecho, desde su participación con el equipo nacional, Polanco exhibió calidad que lo llevaron a representar con dignidad el país en certámenes internacionales de importancia, tales como los Juegos Panamericanos de Lima, Perú,en el 2019 y los Olímpicos de Tokio 2020, entre otros, en donde aún sin ganar medallas, puso de manifiesto las virtudes que le adornaban como boxeador.
Ya como profesional, en donde debutó el 19 de septiembre del 2020, ocasión en que venció a Jesús López Pérez, Polanco, a quien apodan “El Rayo” ha hilvanado un cúmulo de impresionantes victorias que hacen suponer que en él late una futura estrella del pugilismo.
En efecto, en su más reciente pelea, celebrada el pasado sábado, en el Teatro del Madison Square Garden, de Nueva York, Polanco relativamente vapuleó al argentino Marcelino López, en un duelo preliminar de una velada en la que participó como estelarista la pugilista norteamericana Mikaela Mayer frente a la británica Sandy Ryan.
Polanco envió cuatro veces a la lona a López en su camino a noquearlo técnicamente a los 2:08 segundos del sexto asalto.
Polanco fue muy superior a su rival en una contienda que representó para él su victoria número 14, sin derrotas, con nueve de ellas por nocaut.
Que conste, López subió al cuadrilátero con muy buen récord (37-4-1, con 22 por la vía rápida ), lo que indica que no es un bulto. Sin embargo, nada pudo hacer frente al plan de demolición que ejecutó sobre él Polanco, quien enseñó notables progresos.
Polanco, quien tiene como promotor al afamado e influyente empresario norteamericano Bob Arum, quien regentea la prestigiosa firma Top Rank, es dueño de una velocidad meteórica, aceptable boxeo y un poder devastador en ambos puños, tal y como lo demuestra su marca.
Con apenas 25 años de edad, Rohan Polanco da la impresión de que está llamado para hacer grandes cosas dentro del boxeo rentado. Es cierto que todavía debe seguir aprendiendo y puliendo su estilo. No obstante, en su caso, podría ser cuestión de tiempo el que logre alcanzar planos estelares. El muchacho tiene condiciones y representa una sólida esperanza de Dominicana para llegar al estrellato. No lo pierdan de vista. PARA QUE LO APRENDAS O LO RECUERDES: A propósito de los welters junior, es oportuno decir que, el 28 de octubre de 1972, en el entonces Gimnasio Nuevo Panamá –hoy Roberto Durán-, Antonio Cervantes Kid Pambelé, se convirtió en el primer colombiano en ganar un título mundial en boxeo, tras noquear al local, Alfonso Peppermint Frazer. A partir de ahí comenzaría la leyenda de uno de los grandes de todos los tiempos del boxeo latinoamericano y mundial.!Suena la campana! ¡Climmp!
PIE
Osvaldo Virgil